Una quemadura es una lesión a la piel u otro tejido orgánico causada principalmente por el calor, la radioactividad (radiación), la electricidad, o el contacto con productos químicos.
La gravedad de una quemadura dependerá de su profundidad y extensión.
Para las quemaduras que no requieren injerto cutáneo, los objetivos de rehabilitación son:
· Evitar aparición de rigidez: Se realiza mediante movilizaciones pasivas.
·Mantener el tono muscular: Se realizan contracciones isométricas e isotónicas dependiendo del grado de lesión.
·Medidas anti-edema: Se puede realizar mediante drenaje linfático manual.
·Favorecer la cicatrización normal y patológica (hipertrófica y/o queloide): Se realiza mediante la aplicación de electroterapia con predominio el uso del láser terapéutico y ultrasonido terapéutico.
Para las quemaduras que necesiten un injerto de piel para su tratamiento, los objetivos serán los mismos; sin embargo se agregaran:
·Evitar adherencias: Se realiza masaje para liberar la cicatriz, al igual que la aplicación de electroterapia con predominio el uso del ultrasonido.
·Favorecer la bipedestación y marcha: Se realiza con ayuda de vendaje compresivo para evitar la aparición de edemas.